MUJER

Caos.  Tener que ser bonita... Si no eres bonita las cosas se ponen difíciles.  Un pecho con el cuál me siento insegura... una cintura que no me hace feliz. Vivir con el miedo a ser traicionada porque... los hombres... son hombres y todos fallan. 

El cabello largo, las manos delicadas,  los pies finos. 

Cocinar, cuidar, procurar. 

El deseo de que alguien me ayude, que me cuide y se preocupe por mi.  

La ropa, zapatos,  maquillaje, buen gusto, buena comida, buena vida. 

Magia. El misticismo,  la conexión con la tierra, con uno mismo, con el más allá... ver sobre lo evidente. Los ojos de mujer. 

Emoción. SENTIR, ser frágil.  Aunque no me gusta serlo. Llorar. No tener que ser fuerte todo el tiempo... ojalá pudiera descansar más seguido de ser fuerte. 

No tener que resolver todo. Todo el tiempo.  

Sentir miedo... de que me sigan,  que me toquen, que abusen. Miedo de ser vieja, de no saber si tener hijos, de no cubrir el estándar, la idea social de femineidad. 

Siempre pensé que ser mujer es triste. 

Y entonces me pregunto si las conexiones elevadas son exclusivas de los iluminados.

Tal vez mis ambiciones son desmedidas,  irreales. Busco lo extraño, lo diferente, la trascendencia de la unión entre dos seres... lo que supera las expectativas... la Magia...

 La magia... 

Y me volví sorora, amistosa,  cordial... 

Me preguntaron que era para mí ser mujer... 

Creo que no estoy segura. 

Sólo sé... que soy vida, fuerza, resistencia, cuidado... bailarina, loca, bruja, puta, guerrera, luz... dolor, lágrimas, retorcida, freaky, intensa, consejera, amiga, hija, hermana. 

Cansada de escuchar: Esque eres mujer...

Me preguntaron que me hace sentir mujer... 

Y creo que no lo sé...

Solo sé que lo soy... y que estoy muy segura de ello.