Flameantes pasiones de antaño siguen vigentes en tu actualidad que supuestamente es mía.
Yo me miro y a través de los ojos del mundo, me veo preciosa, querida, bella, deseada, amante y fiel... Y te veo ajustandote a mi ser mientras te obsesionas con las vistosas sueltas de generosos cuerpos y pronunciadas curvas, vulgares, sucias, putas y perfectas que sí merecen el deseo infame con el que sueño todos los días para que me vieras a mí. Y el romance y las canciones y las poesías que me has negado... Ahora las encuentro en tu historia orfebrando a quien quizá de verdad te incineró el alma... Vacía, muerta... Deshoyada... Me quiebra la realidad y los pretextos y las justificaciones.
Quiero la pasión, la sangres y la gloria, la pena, la lujuria, la alegría, la añoranza, la sonrisa... Me amas?